domingo, 13 de septiembre de 2020

La esencia de vivir.

 Algunas vez, escuché palabras tristes,

que mi corazón y alma sintieron,

Esas palabras ya no existen, ya no duelen.

 

Ahora solamente existen momentos felices,

al ver seres parte de mi crecer,

sus corazones laten como parte de mi esencia,

parte de mi mismo ser.

 

Hasta el último día de mi existencia,

no descansaré hasta ver que sus vidas, sean lo único de mi vivir.

Ya no hay desolación, ni sufrimiento,

no hay lágrimas que mortifiquen mi existencia

Solamente escuchar su respirar,

Y sentir su latir, es la única motivación que tengo,

para seguir viviendo por el resto de la eternidad.

 

Mi sangre seguirá viviendo,

mi corazón seguirá latiendo,

En el recuerdo eterno de quién un día fui,

y  un suspiro, se quedará impregnado por la esencia de vivir.

jueves, 11 de junio de 2020

Ya no hay sueños.

¿Ya no hay sueños?
Un suspiro corrió y desahogó su decadencia en lo lejano de un anhelo.

Cada noche, cada estrella,
Son las notas de una canción que se quedó en la nostalgia.

Ya no hay tiempo para soñar,
Ya no hay tiempo para anhelar.
Ahora ni suquiera hay tiempo para suspirar.

El tiempo sigue su marcha,
Llevando mi alma a la eternidad,
Ya no habrá tiempo para sufrir,
Y mucho menos para pecar.

Solo habrá un momento,
Para ver si, si la noche menos esperada,
Haya un sueño que recordad.

¿Ya no hay sueños?

Al parecer, ya no.
Se los robó el último aliento que desapareció, en un grito desesperado.
Por decir ¡Adiós!