Realidades

Partamos de una realidad,
Que para cada uno será diferente,
ya qué a medida de tus necesidades,
no podrán confundirse con las mías.

Partamos desde un interés común,
Beneficiando a nuestros corazones,
Haciendo que nuestras almas sepan el rumbo,
Haciendo que el pensamiento genere una idea,
En la cual el amor pueda ser eterno para ambos.

Hagamos un trato,
De no herirnos,
De no faltarnos,
De que nuestro cariño sea modificado día a día,
Hagamonos eternos con las palabras,
y demostremos que sí existe,
ese cariño que fortifica la creencia de qué la realidad,
es una verdad que puede ser pura,
sí la razón, es la que nos da la pauta en el tiempo.

El pasado es historia, el presente es una bendición,
En el futuro espero estés presente para adorarte, en vida y en mi corazón.

Divina

Apagaré la vela, para encender otras,
Iluminaré los senderos que han quedado en desolación,
Intentaré buscar en la oscuridad tus pasos,
Aunque sé que será dificil llegar hacia donde tu estás.

Mi esencia se ha perdido,
Mi ser está confundido,
Entre este mundo y el otro,
Ya nada tiene sentido.

Dios, tú tienes la mejor respuesta,
Tú eres la esencia,
Eres amor,
Eres luz,
dime entonces ¿Qué estoy haciendo mal, para no encontrar lo divino?
Pensé haberlo hallado, y no está en mis manos tomarlo.

Entonces, ¿Qué debo hacer?
¿Ser paciente?
¿Ser cautelozo?
¿Ser más entregado a ti?
Si eso haré, te entregaré todo lo que queda de mi alma en trozos,
Y tal vez aceptes éste pobre corazón, que ya no tiene valor.
Eso haré, para qué hagas en mi vida, lo que tú mejor quieras,

Hoy te entrego mi alma y corazón,
Hoy dejo en tus manos mi vida,
Para que decidas en ella, lo mejor que consideres,
Gracias Dios por estar en mi vida,
Gracias te doy, para que en la eternidad pueda contemplar tu imagen divina.

Gracias

Otra vez con la luna llena, se fue una luz,
Una esencia que perdió su aroma,
Una mariposa que destrozó sus alas,
Y la luna reflejó todo lo maravilloso que pasé a tu lado,
Estrechando con gran cariño tu cuerpo,
Ese cuerpo que no alojó el amor que sentí por ti.

Ya ha pasado el tiempo,
Y aun puedo recordar tu voz,
Cada palabra hermosa que me llenaba de ilusión,
Cada mirada tuya reflejando el amor.

Todo se desvaneció,
Nada más para quedar como un bello recuerdo,
Que de mi mente espero no se borre jamás,
Y que mi propia vida quiso guardar,
Por sí un día decidías regresar.

Hoy me doy cuenta que no,
Que nunca llegará ese día,
Que en tus brazos te llevaste mi alegría,
Que mi corazón no volverá a sentir igual.

Hoy, es el día que te doy gracias,
Gracias por haber aparecido en mi vida,
Gracias por tus tiernos besos,
Por tus nobles caricias,
Gracias por tu compañía,
Gracias por haber existido en mi,
Gracias, no hay más que decir.

Porque así como se puede odiar,
Así se puede amar,
Y lo único que odio,
fue ese viernes, en una noche apartada,
Cuando decidiste decir adiós,
Es más el sacrificio,
A cada momento, en cada suspiro,
guardar para siempre a perpetuidad,
Tú aroma, tus besos, tu calor,
Porque sé que jamás volverán,

Hoy también digo Adiós,
Porque sé que tu alma ha encontrado su destino,
Porque sé que tus ojos no me volverán a ver jamás,
Porque sé que de tus labios, no tendré una palabra,
Mucho menos un beso.

Gracias le doy a la vida eterna,
Por haberte amado,
Gracias por todo lo que hiciste en mi vida,
Gracias por todo, mi corazón,
No dejará de agradecerlo nunca.